Engina, la Indian Cafe Racer que acapara premios en concursos
En septiembre del año pasado, la Engina se estrenó en el Glemseck 101 e, inmediatamente, se impuso a la competencia, pilotada por la 'stunt' y modelo Mai-Lin Senf en la carrera Clash of Legends.
La Engina logra trofeos allá donde va
Desde entonces, la Engina se ha impuesto en numerosos concursos de carreras al sprint y de diseño. El último galardón ha sido vencer el prestigioso Custom Show Emirates, en Abu Dhabi.
Los premios se acumulan en el palmarés de esta Indian, ya que, en Alemania, triunfó en el Custom Show, de Dortmund, y en el Berliner Motorrad Tage, de Berlín. En Italia, obtuvo el premio Ferro Dell Anno, en la Motor Bike de Verona y en Suiza ganó el primer premio en el Swiss Custom, de Zürich.
Motor V-Twin Thunder Stroke 111
Gran parte del mérito de estos brillantes resultados debe atribuirse al motor Thunder Stroke 111 de la Indian. El gran V-twin es una parte integral del diseño y Louis le ha dado al motor cromado el protagonismo de la moto, de ahí el nombre de Engina. El poderoso bloque de 1,8 litros es una impresionante combinación del aspecto clásico de la Indian, con la tecnología de última generación.
Su diseño, con detalles como las cubiertas de culata con aletas en ángulo, rinde homenaje a los motores Indian de los años 40 y 50, y goza de un estatus de culto entre los aficionados a la marca norteamericana.
125 CV sin perder su esencia clásica
Para darle la potencia necesaria para la competición, Louis buscó al especialista en motores Ulf Penner, con el objeto de explotar todo el potencial de este motor de par brutal. El propulsor incorpora nuevos árboles de levas, flujo de aire más directo, culatas mejoradas y un nuevo mapa de motor. El resultado es que el Thunder Stroke 111, que prácticamente no ha sido tocado visualmente, ahora ofrece casi un 70% más de potencia. Un nuevo colector de STParts, con un silenciador Shark, asegura que los 125 CV también tengan el sonido adecuado.
Componentes y especialistas de primer nivel
Todo encaja en un nuevo chasis ligero fabricado por UNO, que monta una nueva horquilla delantera invertida y un amortiguador trasero Wilbers. El sistema de frenado Brembo brinda la potencia de detención necesaria y las llantas Kineo están hechas a medida. Una triple tija, elaborada por Alpha Racing, con un manillar Gilles completan el conjunto.
Para la cúpula, el asiento y el deposito, Louis acudió a Michael Naumann, especialista en personalización que ya ha recogido numerosos premios por sus creaciones personalizadas y que trabajó codo con codo con el miembro del equipo de Louis, Kay Blanke. Danny Schramm, de Schrammwerk, fue el responsable del llamativo trabajo de pintura en rojo y blanco, adoptando los colores de las marcas Indian y Louis. La construcción general de la moto fue realizada por Detlef Stüdemann y Martin Struckmann, del equipo de montaje de Louis.
