Sebastian Vettel venció en Singapur sobre Leclerc

La última vez que Sebastian Vettel subió a lo más alto del podio fue en el Gran Premio de Bélgica 2018. Ahora, 392 días después, el cuatro veces campeón del mundo regresó a la cima al imponerse en el Gran Premio de Singapur.

Además, derrotó a su compañero Charles Leclerc, segundo, y quien largó desde la posición de privilegio.

El tercer sitio fue completado por un Max Verstappen que aprovechó el alto riesgo tomado por Mercedes de esperar un auto de seguridad.

Así, los dos monoplazas de las flechas plateadas quedaron cuarto y quinto con Lewis Hamilton y Valtteri Bottas.

El mexicano Sergio Pérez abandonó impidiendo su tercera carrera consecutiva en la zona de los puntos.

La carrera

La arrancada no representó una complicación para Charles Leclerc, quien defendió su primera posición de un pequeño ataque de Lewis Hamilton.

La verdadera acción se presentó en la parte media, con el Renault de Nico Hulkenberg teniendo un contacto con el McLaren de Carlos Sainz, provocando daño en los dos monoplazas pero costando 42 segundos en los pits en el caso del español.

De igual forma, el Williams de George Russell y el Renault de Daniel Ricciardo tuvieron un incidente, pero el británico llevándose la peor parte al ser obligado a ir a boxes para colocarle una nueva ala delantera. En contraparte, el aussie mantuvo el ritmo y al final de las primeras 10 vueltas ya había escalado siete lugares luego de haber arrancado desde el fondo de la parrilla.

Pero la buena remontada del australiano se cortó con un abandono en la parte final de la competencia.

Mientras al frente se establecía el orden, en medio Ricciardo, los Racing Point de Lance Stroll y Sergio Pérez, junto con el Toro Rosso de Daniil Kvyat ponían las emociones en pista con sus batallas, al frente el orden cambió con la entrada a pits de Sebastian Vettel y Max Verstappen en la vuelta 21, siendo los primeros líderes en cambiar de gomas.

Un giro después Charles Leclerc hizo lo propio regresando a pista detrás de su compañero alemán y delante del piloto holandés de Red Bull Racing, una situación que molestó al monegasco quien no entendía cómo había perdido la posición ante Vettel.

Mercedes apostó por un auto de seguridad para meter a sus dos monoplazas, pero al ver que no aparecía el primero en ingresar fue Bottas en el giro 23, regresando detrás de los Ferrari y Verstappen.

Hamilton se quedó en la cima en solitario y pidió aguantar el mayor tiempo posible en la pista, pero conforme esto pasaba Vettel recortaba la diferencia. Las flechas plateadas le dieron un margen de cinco giros en comparación con su coequipero finlandés y en la vuelta 28 llegó a pits.

Su retraso le costó regresar hasta la cuarta posición, detrás de los dos Ferrari y Verstappen.

Como si la fortuna quisiera reír un poco de Hamilton y Mercedes, una seguidilla de tres banderas amarillas, con la respectiva salida del auto de seguridad, se presentó en la segunda parte de la carrera.

La primera neutralización se dio por un contacto del Williams de George Russell. La segunda por el abandono del mexicano Sergio Pérez por una falla mecánica cuando ya estaba en la zona de los puntos. La última a consecuencia de la salida del Alfa Romeo de Kimi Raikkonen tras un contacto con el Toro Rosso de Daniil Kvyat.

Estas situaciones solo beneficiaron a Ferrari y a Vettel, quienes conservaron los neumáticos para cruzar la línea de meta en el primer 1-2 de la Casa de Maranello de la temporada, pero también, en la primera ocasión que un equipo consigue esto en el trazado de Marina Bay.